En los inicios del S XXI, la Europa social se resquebraja un poco más cada día. Las medidas que Sarkozy ha puesto en marcha con los gitanos son, sin ninguna duda, propias de una política racista.

Las expulsiones de gitanos, calificadas por el Gobierno francés de “ devolución de ciudadanos en situación irregular”, son también, una invitación para que la ultraderecha fascista y xenófoba recupere espacio en Europa. La crisis económica ha provocado, tanto en Europa como en EE.UU. que se entremezcle la derecha política y económica con la deriva racista y la intolerancia neoconservadora. En este espacio Le Pen , el Tea Party y los suyos se crecen.

Lo preocupante es que esta decisión de Sarkozy no fue censurada en Europa. Ninguno de los líderes de los 27 países, tampoco el Zapatero de la alianza de civilizaciones, criticó la política del Gobierno Francés de desmantelar campamentos. Nadie dijo nada de la expulsión de los gitanos rumanos y búlgaros aunque, en definitiva, se trata de un nuevo golpe a quienes sufren la crisis.

Lo cierto es que hemos asistido a un nueva demostración de lo que es el Tratado de Lisboa. La Europa excluyente. La Europa que propone y exige recortes sociales, la que impone recorte de derechos laborales, la que empieza a perder cohesión social. Atentos y atentas porque el silencio cómplice ante la expulsión de ciudadanos por ser de una etnia determinada, confirma el auge de la ultraderecha que cada vez se sienta en más Parlamentos y gana más espacio. El próximo 29 de Septiembre, apoyando la Huelga General, podemos empezar a decir ya basta, Hay otra forma de salir de la crisis.

¿sólo tiene derecho a la expulsión?


¡¡ SOBRAN RAZONES PARA HACER LA HUELGA GENERAL DEL 29 DE SEPTIEMBRE¡¡