La primera conclusión, evidentemente personal, es que los resultados de las elecciones generales italianas confirman que las políticas que se aplican a la ciudadanía siguiendo los mandatos de la Comisión Europea, del Banco Central y del Fondo Monetario Internacional, son peligrosas para la democracia.
Los resultados dicen claramente que Mario Monti, el primer ministro impuesto por la Troika tras la forzada dimisión de Berlusconi en 2011, ha sido rechazado amplísimamenmte. Monti representaba los principios y valores neoliberales causantes de la crisis y de la estafa financiera que está arrasando el Estado social europeo. Monti, Director europeo de la Trilateral, del Grupo Bilderberg y de Goldman Sach llegó a dirigir el gobierno italiano sin haber sido votado en una elecciones democráticas. Fue el que aplicó las duras medidas de ajuste al pueblo italiano. Se empleó a fondo contra los salarios y contra los servicios públicos para garantizar la contención del déficit público. En las elecciones, este tecnócrata ha obtenido el 10% de los votos. Eso significa que ese es el apoyo ciudadano que tienen las recetas de la Troika en Italia. Aquí, en españa, todavía dicen las encuestas que el PP supera el 20 % de apoyo.
Las elecciones italianas también ponen en evidencia que quienes participan de la política de recortes (el Partido Democrático de Bersani participó en ese gobierno presidido por el tecnócrata impuesto por los banqueros) pagan las consecuencias de su indefinición y no cristalizan como alternativa puesto que son seguidistas de las políticas de ajuste. Algo así puede pasarle al PSOE. Bersani ha conseguido una mayoría muy precaria en el Congreso y en el Senado, seguido muy de cerca por Berlusconi y eso llena de incertidumbres el futuro lo que, una vez más, pasará factura a la ciudadanía. Lamentablemente Berlusconi sigue estando presente, con mucho apoyo ciudadano, lo que ha llevado a su partido a un resultado muy cercano a Bersani lo que, evidentemente, añade dudas a la situación.
En este contexto, surge el Movimiento 5 Estrellas de Beppe Grillo, con un 25 %. El Movimiento 5 estrellas representa la antipolítica consecuencia de la frustración de una parte importante de la sociedad frente a los partidos mayoritarios incapaces y cómplices del golpe de la Troika. Ciertamente, ese 25 %, no está en condiciones de aportar ninguna solución a los problemas ciudadanos. Es verdad que ha recogido una buena parte del cabreo de la gente, pero nada más.
Reconozco el fracaso de la coalición «Revolución Civil», (Italia de los Valores, Federación de la Izquierda -de la que forman parte Rifondazione Comunista y el Partito dei Comunisti Italiani-, Movimiento Naranja y Federación de los Verdes). Lamento, profundamente, que no haya obtenido escaños a pesar de su defensa de la alternativa al proyecto neoliberal que representan tanto Monti como Berlusconi. Se que continuarán luchando contra estas políticas neoliberales y espero que consigan que sus propuestas sean conocidas, entendidas y se abran paso entre la gente y que allí, en Italia, pueda construirse una alternativa a la actual política neoliberal y antidemocrática de la Unión Europea.