Ya que se empeñan hablaré de lo de Cataluña

No hubo manera de evitarlo. Ayer, aunque había Pleno en Las Cortes de Aragón, el tema central era Cataluña, las preguntas pactadas y se nos emplazaba a responder ante el «ataque catalán» al Estado.
Lo primero que dije, y digo, es que, por mucho que se empeñen algunos y aunque, con la ayuda de la prensa, estén consiguiendo hacer creer a la gente que vive en Cataluña otra cosa, no hay un conflicto entre territorios, sino que, como siempre, hay un conflicto de clases.

Unos y otros, los soberanistas y los centralistas están aprovechando esta situación para desviar la atención del verdadero problema urgente a resolver. La crisis, la destrucción de empleo, el ataque a los servicios públicos y el desmontaje del estado del bienestar, pero hoy el tema es Cataluña.

No son los españoles, ni el Estado, el que jode la vida a quienes viven en Cataluña. Es el liberalismo salvaje que han apoyado y apoyan (lease CiU) quienes hoy desvían la atención con el tema soberanista. La independencia de Cataluña no arreglaría nada el drama social y económico que vive la gente en Cataluña, en Madrid, en Aragón, en Portugal, en Grecia o en Malta, por citar algunos sitios.
Pero como la única respuesta que me pedían era sobre las preguntas (lo demás daba igual), a esa pregunta sobre las preguntas respondí.
Hay otra cuestión previa: ¿Se puede preguntar?. Legalmente no, pero yo creo que debería ser legal poder preguntar.  Me dicen que la Constitución no lo permite. Tampoco permitía anteponer los bancos a las personas y se cambió en una tarde. Cámbiese para que se pueda preguntar. ¿Quien tiene miedo a la pregunta?. Si se permitiera la pregunta se podría saber, de verdad, lo que opina la gente.
Yo, a la pregunta de si Cataluña puede ser un estado, respondería SI. En el modelo republicano federal, plurinacional, pluricultural… que defiendo, cabe.
A la segunda, a la de si puede ser independiente, respondería rotundamente NO. No soy independentista ni soberanista. Creo en la lucha de clases y no en la de banderas.
Pero claro, para hablar así de claro y dar mi opinión, necesito que sea legal que me pregunten y que se respete mi derecho a decidir.
Mientras tanto, con permiso de Salvador Seguí, dejo esta aportación al debate

Cataluña