Hoy, el Sr. Montoro, en el Congreso presentará los Presupuestos Generales del Estado. Es un hecho importante y fundamental que, probablemente, pasará desapercibido. Las páginas de la prensa, los comentarios de la gente, las preocupaciones,…. son otras.
No digo yo que no sean importantes. Está el tema asqueroso de las tarjetas de Bankia. Es verdad que una cuadrilla de sinvergüenzas han robado más de 15 millones de €, pero también es verdad, y apenas se habla de ello, que D.Florentino Pérez, se va a embolsar 1.345 millones de €, que vamos a pagar entre todos los usuarios del gas porque hay que indemnizarle por el fracaso del proyecto Castor. Está el tema de las primarias (¿son de verdad primarias?) en varios partidos. Está un macrocongreso por internet de quienes asaltan los cielos, pero no saben si se presentan a las municipales que, a lo que parece, es más terrenal. Y está el caso del Ebola (me alegro por Teresa). Ciertamente.
Pero hoy, y parece no importar a nadie, presentan en el Congreso unos Presupuestos que consuman la desigualdad social en nuestro país. Unos Presupuestos que no van a reactivar la economía ni a generar empleo pero que, eso si, traerán más pobreza y exclusión social.
La inversión pública es un 34% inferior a la de 2011, la cobertura por desempleo se reduce un 15 frente a 2014. En 2010 el 74% de los desempleados tenía algún tipo de ingreso público y ahora sólo lo tiene el 52%”. También incluyen otra rebaja salarial para quienes trabajan en el sector público. La Ley de Dependencia tan solo recoge un 0,4% de cofinanciación con las comunidades. Anuncian un recorte del 28% en materia de vivienda .
A nadie parece preocupar que estos PGE incrementan la desigualdad. Un dato, mientras uno de cada cinco españoles están en el umbral de pobreza y 750.000 hogares siguen sin ingresos, lo único que crece de manera exponencial es el número de ricos y pobres.
Pues eso, así estamos.
Los árboles, muy bien plantados y distribuidos, no dejan ver el bosque